Del mismo modo, en los campos de la electrónica, la electrónica transparente o la optoelectrónica, los requisitos de estas tecnologías pueden exigir el uso de láminas de grafeno en lugar de grafeno en polvo. Los chips o sensores más rápidos y eficientes, que además deben ser casi transparentes, deben desarrollarse utilizando el grafeno puramente monocapa y sin defectos. Sin embargo, grafeno en polvo tiene el potencial de alterar, por ejemplo, la producción de circuitos electrónicos impresos mediante el uso de tintas de grafeno. La alta conductividad de nuestro Graphene 99 se puede utilizar para transferir esta propiedad a la tinta y, en consecuencia, se podrían imprimir estructuras, circuitos o cualquier configuración deseada directamente. Paralelamente a la conductividad eléctrica, podrían desarrollarse circuitos para disipar el calor, facilitando y mejorando el rendimiento y la vida útil de los dispositivos electrónicos.